La salud española: lo bueno y lo malo

Me importa mucho la buena salud, y antes de llegar a España me imaginaba a mi madre española dándome platos de embutidos grandes y un montón de arroz sin verduras ni frutas. La verdad es que he tomado algunas comidas como esa, pero también he visto cómo el estilo de vida español puede mantener la buena salud.
Lo que me ha frustrado mucho es que mi madre española dice que no quiere engordarme mientras me sirve platos enormes. Cuando empieza la comida, ella me da lo que se llama “un trocito de pan” pero que es en realidad la mitad de una barra de pan. Después, ella me sirve la sopa de lentejas, chorizo y morcilla, después de asegurarse de que hay embutidos suficientes en mi plato hondo. El plato principal puede ser más normal para mí, como pescado o ternera, y el postre también es saludable, como fruta o yogur, pero lo que me preocupa es el pan y los embutidos. No me gusta el pan ni los embutidos mucho, pero en España es una parte necesaria de la comida. ¿Cómo puedo decir que no quiero comer más sándwiches de chorizo ni “trocitos” de pan ni sopas de morcilla?
Cuando critico la comida española tanto, es necesario que yo explique lo mucho que me encanta de España. Nunca he hecho ejercicio como en España. Cuando voy andando a la universidad todos los días, veo a las madres caminando hacia el colegio con sus hijos, los trabajadores yendo caminando a la oficina, y los abuelitos yendo andando a una cafetería con sus amigos. Los españoles andan muchísimo, y eso me alegra mucho porque en Estados Unidos, fuera de las ciudades, nos quedamos en casa demasiado, y la única manera de ir al supermercado, la escuela, y los restaurantes es en coche. No puedo cambiar la geografía de Estados Unidos, pero cuando estoy harta de comer pan, puedo disfrutar mucho de ir andando a todas las partes de León.

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