En esta obra de arte, la naturaleza es el evento principal. Aunque este llena de vida y movimiento, existe en un lugar aislado. El pintor se encuentra en medio de un campo de pie, entre las brillantes flores rojas observando el colorido cielo de la tarde. En la distancia hay una montaña oscura y algunos árboles rodeando un lago. Los árboles están parados rectamente y son los únicos objetos que no se mueven en la dirección del viento poderoso. Los colores de la pintura se funden a causa de este viento y difumina la visión del espectador.
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